Proporcionar evidencia empírica que sirva de base para establecer prioridades en las políticas nacionales y sub-nacionales dirigidas a la prevención y eliminación del trabajo infantil es uno de los objetivos de la Iniciativa Regional. Por ello, a través de un trabajo conjunto con la Oficina Regional para América Latina y el Caribe de la OIT y la CEPAL desarrollaron una herramienta con dos metodologías: a) el Modelo de Identificación del Riesgo de Trabajo Infantil (MIRTI) y b) el Índice de Vulnerabilidad al Trabajo Infantil (IVTI), los cuales -a partir de la información estadística existente en los países (encuestas, censos y/o registros administrativos)- permiten, por una parte, identificar los territorios más vulnerables al trabajo infantil y, por otra, estimar el peso de diversos factores asociados con el fin de definir qué acciones multisectoriales son más efectivas para interrumpir la trayectoria del trabajo infantil y, en el mediano plazo, reducir el indicador de manera sostenida.